
¿Sientes que tu cabello no crece? Lo más probable es que sí (si no es así, podría haber una causa subyacente, en cuyo caso deberías consultar con un médico). Pero si tu cabello se cae a un ritmo igual o mayor al que crece, nunca verás aumentos de longitud.
El cabello puede mostrar tasas de crecimiento estancadas o negativas por diversas razones. ¿Te suena alguna de estas? Si es así, es fundamental romper con estos malos hábitos capilares y empezar a promover hábitos saludables que te permitan aprovechar al máximo el crecimiento.
SOBREPROCESAMIENTO QUÍMICO
La superposición de relajantes, la decoloración agresiva y la aplicación excesiva de productos químicos son las principales causas del cabello dañado. El cabello dañado seguirá creciendo desde el cuero cabelludo, pero a menudo se rompe en las puntas o requiere un corte drástico para eliminar las secciones dañadas. Pregúntate si:
- Relaja/texturiza/colorea tu melena en casa
- Tiene un proceso de alisado químico y color.
- Tener un color de cabello al menos dos tonos más claro que tu tono natural.
- Relájese con más frecuencia de lo recomendado
- Se aplicó un relajante o texturizador sobre mechones previamente alisados.
Si respondiste afirmativamente a alguna de estas preguntas, es posible que tu cabello esté sobreprocesado. Aunque los estilistas no siempre son infalibles, suele ser mejor recibir servicios químicos en un salón de belleza con un profesional capacitado.
RECORTAR CON MUCHA FRECUENCIA
Se puede tener demasiado de algo bueno, y los cortes entran en esta categoría si quieres un cabello más largo. Muchas mujeres recurren a cortarse el pelo ellas mismas en casa después de sufrir las consecuencias de un estilista que usa tijeras. Un cabello sano no requiere tantos cortes como uno que no lo está; cuanto menos le hagas a tu cabello, menos probable será que necesites cortes frecuentes que te quiten un centímetro o más.
El cabello crece un promedio de 6 mm a 12 mm al mes, así que si lo cuidas adecuadamente, no necesitas cortar más de 12 mm cada pocos meses si quieres ver crecer. Cuando lo recortes, asegúrate de usar tijeras diseñadas para este proceso, y no tijeras domésticas sin filo que sirven para múltiples tareas, desde cortar manualidades hasta papel de regalo.
FALTA DE ACONDICIONAMIENTO
El cabello seco y quebradizo puede afectar a cualquiera si no se acondiciona con regularidad. Si actualmente no lo haces:
- Aplicar una crema hidratante según sea necesario, ya sea una vez al día o varias veces por semana.
- Acondicionamiento profundo al menos dos veces al mes, preferiblemente con calor.
- Acondicionador después de cada champú.
- Cómo aplicar un acondicionador sin enjuague después de una sesión de champú y acondicionador…
Quizás necesites empezar. Cuantos más productos y prácticas hidratantes uses, mejor acondicionado estará tu cabello y menos propenso a quebrarse.
ESTRUCTURA POBRE DE PROTEÍNAS
Además de un buen nivel de hidratación, el cabello necesita un equilibrio proteico adecuado para mantenerse fuerte. Cuantos más productos químicos o prácticas agresivas se sometan a tu melena, más importantes se vuelven las proteínas, ya que cada alisado, retoque, color e incluso plancha alisadora compromete la resistencia de las cutículas.
El cabello débil suele quebrarse tras volverse más fino y menos elástico con el tiempo. Dado que el cabello está compuesto de proteínas, las necesita de una forma u otra. Si sigues una dieta saludable, no necesitarás tanta proteína como quien no la sigue, pero un poco de proteína ayuda a la mayoría de las mujeres a mantener un cabello fuerte.
EDAD
El envejecimiento trae consigo una serie de complicaciones en la vida, y una de ellas es el cabello. A medida que envejecemos, es probable que nuestro cabello se debilite. Años de peinado con calor y decoloración pueden acumularse y causar daños importantes. Además, la producción de grasa en el cuero cabelludo suele disminuir después de los 45 años, por lo que el cabello puede estar menos hidratado y lucir más áspero, haciéndolo más susceptible a daños y roturas.

